martes, 23 de junio de 2009

GRADUACIÓN

Por fin hemos terminado hoy con los alumnos. Es el día de la graduación de Infantil y 6º de Primaria. Los de 5 años, muy formalitos ellos con su beca amarilla sobre el pecho, su camisa blanca y su gorro de graduación, han celebrado su paso a Primaria en septiembre. Cientos de padres provistos de cámaras de última generación han sido emocionados testigos del acto. Todos los niños se han portado muy bien, muy formalitos como protagonistas del día. Siempre he dicho que los profesores de Infantil tienen el mayor mérito de todas las etapas educativas, sin desmerecer ninguna y dicho sea con todos mis respetos. Ahí estaban ellos, infantes y profesores, cada uno representando su papel. Lecturas, actuaciones, flores, recuerdos, buenos deseos... todo ha tenido cabida en la emotiva ceremonia. Luego han celebrado con un ligero refrigerio el adiós.
Más tarde, eran los de 6º de Primaria los que recibían la despedida de todos. Dentro de unos meses ocuparán otras aulas, la mayoría en el vecino IES. Todos se van con un buen recuerdo del Colegio y les cuesta marcharse. Sus compañeros de cursos inferiores les han ofrecido poesías, bailes y canciones preparados con esmero y cariño. Ellos a su vez han cantado un rap recordando sus años escolares y han bailado con mucho estilo. Todo ha sido bonito y emocionante. Se nota el cariño que todos ponemos en lo que hacemos, cada uno en su medida. Este tipo de actos suponen mucho trabajo y horas de preparación. Al final siempre nos embarga la emoción y notamos una sensación agridulce: un año más, hemos llegado a buen puerto y a la alegría de la cercanía de las vacaciones se une la penilla por terminar una etapa y dejar de ver a unas personas con las que hemos compartido horas y horas de trabajo, excursiones, actos de todo tipo... La enseñanza es un contacto continuo con otras personas, lo que implica emociones, cariño, tensiones, alegrías, disgustos... El intercambio siempre enriquece, pero a veces duele. Al final, casi siempre, prevalecen los buenos recuerdos. Hemos visto a antiguos alumnos que han pasado a enseñarnos orgullosos en la mayoría de los casos sus calificaciones. Es un placer verlos más altos, más guapos, más maduros y metidos de lleno en su carrera estudiantil. Es uno de los aspectos más gratificantes de esta profesión: saber que ayudamos a construir vida, a encontrar un camino, a despertar inquietudes, a desarrollar habilidades. Más que la mera transmisión de conocimientos nos centramos en las personas y les tratamos con un tacto exquisito. La recompensa es la satisfacción personal y el reconocimiento de tantos padres y alumnos que saben apreciar nuestra labor.
Mi Colegio es una maquinaria bien engrasada, un conjunto de excelentes profesionales que saben trabajar en equipo aportando cada uno lo mejor de sí mismo y dotados de una excepcional calidad humana y docente. Nuestra labor conjunta se nota en la toma de decisiones, la elaboración de proyectos y el día a día, no siempre fácil . A veces hay discrepancia de opiniones, como es lógico, pero en general reina la armonía y sabemos solventar las diferencias sin grandes problemas. Sé que en otros centros el clima es muy distinto, lamentablemente, pero yo me siento orgullosa de formar parte de este colectivo dinámico y activo, capaz de crear un ambiente de trabajo serio y riguroso sin perder la alegría. Desde aquí quiero mandar un beso enorme a cuantos están integrados en él y, por extensión, a todos los docentes que afrontan los últimos días del curso soportando los calores, las prisas y los agobios que acompañan al final de cada año escolar.
Sois grandes, colegas.

7 comentarios:

Miguel dijo...

¡Qué graciosos deben de estar los/las muevos/as graduados/as en infantil! En mi época esto no se hacía. Ni tan siquiera cuando se acababa la primaria. Pero hoy la enseñanza, pese a todo, ha mejorado mucho en muchos aspectos. Sé que hay también mucho que mejorar, pero, hay una sensibilidad nueva en las aulas que antes no había.
Ahora mismo estoy en la sala de profesores mientras se está llevando a cabo la evaluación de los cursos que yo no tengo, dentro de un ratito me toca a mí. Son los últimos coletazos antes de las vacaciones.

Felices vacaciones.

Sarashina dijo...

Yolanda, yo también he terminado las clases y ayer por fin, también las evaluaciones. Anoche despedimos a dos compañeras que se jubilan este curso con una cena y mucha emoción. Ahora estamos de papeles y memorias. Ya nos merecemos un descanso, es cierto. Por suerte, no he llegado, como otros años, casi sin aliento al final, y ya casi tengo ilusión por el año próximo, porque, como tú, estoy en un centro bien engrasado, con gente semejante a la que tú dices, y eso es difícil, raro y muy valioso, más en este caso, pues somos nada menos que 113 profesores. Creo que tras las vacaciones, volveré con más ánimo y fuerza a mis clases, y con ilusión, que es lo más importante.
Me encantan los pequeñicos, y es un gozo verlos con sus maestras, tan felices y activos.
En el Reina Sofía de Madrid vi un grupillo de niños de esa edad que nombras, y era una monería. También daba gusto escuchar a las dos maestras, guiándolos por el arte moderno y dándoles explicaciones que los mantenían atentos y calladicos. Era una delicia. Coincido contigo en que las maestras (y algún maestro) de educación infantil son las joyas de la enseñanza. Profesionales como la copa de un pino, sin hacer menoscabo del profesorado de otros niveles, desde luego, pero es que yo les tengo de siempre mucha admiración.

caperucitazul dijo...

Me encanta que haya maestros tan orgullosos de su profesión! Es algo que, seguro, perciben los alumnos. Besos

Yolanda dijo...

Lo de la graduación en Infantil es una moda relativamente reciente. La de 6º más o menos también, antes con la 2ª Etapa no hacíamos nada de eso. Suponen ambas una trabajera considerable, pero, cmo dice un colega mio, son un buen punto a favor del colegio si salen bien, aunque parezca una tontería. Los padres se fijan mucho en estas cosas. Suponen un broche final inmejorable, junto con la proyección de las fotos de las múltiples actividades que llevamos a cabo durante el curso. Se nos olvida que la autopromoción es muy importante, y en los tiempos que corren defender la enseñanza pública requiere muchos medios.
Felices vacaciones, colega.

Yolanda dijo...

Miguel, el comentario iba para ti, se me olvidó poner tu nombre, perdona.

Yolanda dijo...

Clares, por fin hoy ha sido el último día de cole efectivo. Me ha tocado recoger tres clases porque van a utilizarlas para los campamentos de verano y por lo visto son unos pequeños vándalos, así que hay quitar todo de su alcance, manda narices, con este calor infernal y yo guardando libros, papeles, fichas... porque hay que ver la cantidad de material que almacenamos, somos incorregibles.

En verano me toca estudiar Mates, que las tengo muy olvidadas, pues con la jubilación de mi colega me caerá la papeleta de tener que darlas, a reciclarse tocan... Paciencia.
Me cuesta un poco desconectar del trbajo, pero al final lo consigo. Este año de momento no me ha dado el bajón de costumbre, pero tengo que relajarme.
Disfruta del descanso. Un abrazo.

Yolanda dijo...

Caperucitazul, somos muchos los maestros que vivimos con pasión nuestro trabajo, al que dedicamos más tiempo y esfuerzo del estrictamente reglamentario. Todo lo que se vive con intensa pasión agota en ocasiones, pero recompensa, porque da muchas satisfacciones. Yo creo que todo hay que vivirlo así, con intensidad. No me van las medias tintas.
Un saludo.