martes, 24 de diciembre de 2013

NAVIDAD CON CICLOGÉNESIS EXPLOSIVA, DICEN...





LOS NADIES

Sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los nadies con salir de pobresque algún mágico día llueva de pronto la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte; pero la buena suerte no llueve ayer, ni hoy, ni mañana, ni nunca, ni en su lloviznita cae del cielo la buena suerte, por mucho que los nadies la llamen y aunque les pique la mano izquierda, o se levanten con el pie derecho, o empiecen el año cambiando de escoba.
Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada.
Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos:

                   Que no son, aunque sean.
                   Que no hablan idiomas, sino dialectos.
                   Que no profesan religiones, sino supersticiones.
                   Que no hacen arte, sino artesanía.
                   Que no practican cultura, sino folklore.
                   Que no son seres humanos, sino recursos humanos.
                   Que no tienen cara, sino brazos.
                   Que no tienen nombre, sino número.
                  Que no figuran en la historia universal, sino en la crónica roja de la prensa local.
                   Los nadies, que cuestan menos que la bala que los mata.

                                                                      EDUARDO GALEANO

                   Siento no tener ganas de escribir algo más optimista. Me parecen las Navidades más tristes que he visto nunca, con gente cabizbaja, centros comerciales a medio gas, caras mustias... ¿Es sólo impresión mía? Otros piensan como yo, pero lejos de ser un consuelo supone la constatación de un hecho lamentable, de muchos hechos lamentables, de muchas palabras vergonzosas, de muchos sinvergüenzas que mandan en nuestra vida más de lo que queremos admitir... En fin, no quiero amargar las fiestas a nadie, que cada cual las disfrute como quiera y pueda, que descanse, baile, cante o piense como mejor le parezca. En cualquier caso, mi abrazo solidario. 




6 comentarios:

Cabopá dijo...

La ciclogénisis explosiva le tendría que llegar a muchos que ayer, hoy y mañana seguiran medrando y mirando hacia otro lado. A los que no ven más allá de sus narices.

Hoy en la algarabía de una ciudad en la calle y muchos deseos de felicidad. Nadie se daba cuenta de los "nadies", esos que alargan la mano y te dicen, señora feliz navidad en un idioma capurreado de otros sonidos.

Sólo te diré lo que digo siempre estos días, felices, felices todos los días del año, porque sale el sol y tenemos suerte de vivir. Nada más.
Besicos amiga.
Que lo sepas te echo de menos en aquellas crónicas y críticas de cine a las que nos tenías acostumbrados.

Yolanda dijo...

Gracias, Cabopá, por ser la primera en enviarme tu comentario siendo ésta una noche especial. Somos muchos los "nadies", los desheredados, los ignorados, los perjudicados por este sistema insaciable que se traga bienes y personas sin misericordia. Merecemos otros gobernantes, otra recompensa a nuestros esfuerzos. Que ahora pese más la caridad que la justicia dice muy poco en favor de nuestro país. ¿Alguien ve una salida digna? Algún político quizá, pero no quien tiene ojos y oídos para ver lo que está pasando.
Te haré caso y trataré de volver a mis crónicas cinematográficas porque no he dejado de ir al cine, a pesar de lo carísimo que lo han puesto.
Un beso enorme.

Joselu dijo...

Estas navidades también por otros motivos son tristes para mí a pesar de la animación familiar que me rodea por todos los lados. Pero pienso que probablemente yo sea un cenizo.

Han llegado mis sobrinitos de Galicia. Los llevaré a ver una película de dinosaurios. El año pasado fuimos a ver La vida de Pi y, aunque pasaron miedo, les gustó.

La desolación por la vida política y económica es total. No disimulan sus chanchullos, sus latrocinios, su inmoralidad. Les da igual que se sepan porque saben que volverán a ganar las elecciones. Estamos tocados y hundidos y nos costará salir de la sima en que estamos. Leer el periódico es el camino más rápido para entristecerse. ¿Hay alguien que pueda sentir esperanza por nuestro país?

Nosotros aun tenemos una protección que de momento es sólida. Ya veremos dentro de poco. Pero hay tanta gente que no tiene nada… Esos nadies de los que habla Galeano.

En fin, hoy tenemos comida de Navidad y habrá que poner una sonrisa de oreja a oreja, pero en mi interior estoy también triste.

Y sí también echo en falta las crónicas de cine que solías hacer.

Un fuerte abrazo, colega.

Miguel dijo...

Estas fiestas se inventaron con una muy buena intención. Y esta no es otra que la de soñar. Soñar y anhelar en alcanzar estados mejores. Los niños lo tienen claro, pero los adultos quizá no. No se trata de ser feliz a la fuerza en esos días, sino dejarse llevar por las buenas vibraciones que todos (tú también Yolanda) llevamos dentro, y hacer partícipes a todos de ellas. Ya sé que el mundo no es perfecto. Nunca lo ha sido. Pero soñar, eso no nos lo puede impedir ni Wert ni Montoro, ni Rajoy, ¡ni Fabra!. Y de eso se trata Yolanda. De dar una oportunidad a la esperanza, sí, sí, a la esperanza. Y a la posibilidad de escribir una carta a los Reyes Magos. Yo ya la he escrito. Y sé que no todo me lo traerán desde allá su lejano oriente, pero por pedir...

Que tengas unas descansadas y sosegadas vacaciones y un felicísismo año nuevo. Un beso.

Yolanda dijo...

Joselu, las Navidades de este año son difíciles por ser las primeras sin mi hermana. Cada pérdida se suma a las anteriores y es inevitable recordar a los que ya no están. A pesar de todo, hemos pasado ratos agradables con nuestras respectivas familias, aunque no faltan las tensiones y los desacuerdos. O sea, lo normal.
El panorama social y cultural es desolador. Nada contribuye a mejorarlo. El consumo no crece (y a quién puede extrañar) y nuestros mandamases siguen a lo suyo, sin pisar la calle ni querer ver la realidad incómoda que propician sus desmanes. Vamos cuesta abajo y sin frenos. ¿Mejoraremos en 2014? Lo dudo.
Volveré a hablar de cine, siempre hay algo que contar. Han reabierto los cines de Majadahonda, es una noticia estupenda. Así pude ver por fin "La vida de Adéle", que ya daba por perdida. Dura tres horas pero merece la pena, aunque no puedas verla con tus sobrinos, claro. Para ellos reponen esta noche "Up" en la tele, una emocionante fábula sobre el amor. Me hizo llorar y pensar, ay...
Cuídate e intenta relajarte y disfrutar. Un fuerte abrazo.

Yolanda dijo...

Miguel, intento estar bien estos días, sin pedir imposibles. Debería ser suficiente con tener a la gente querida cerca, una casa confortable y comida apetecible en la mesa. Yo tengo todo eso y más y procuro no echar de menos más de la cuenta a los que ya no están y olvidarme del desastre que nos rodea. Lo consigo a medias. Me da tanta pena ver gente tristona, desanimada... Todos parecemos vestidos con la misma grisura. Soy demasiado sensible, lo sé, y lo paso mal. A cambio, también consigo descansar y relajarme, que es lo que más necesito. En fin, hay que intentar no amargarse más de la cuenta. Disfruta todo lo que puedas. Un abrazo.